Después de poco más dos años, en el mes de octubre finalmente vio la luz la tercera temporada de Daredevil, la que es, para muchos, mejor de las adaptaciones de Marvel en Netflix. Después de la infame Defenders, seguimos la historia de Matt luego de la caída de la mano y más importante, la destrucción del edificio en el que Matt quedo atrapado al final de la serie.


Comenzando momentos antes de ese final, vemos como Matt Murdock emprende un viaje de auto conocimiento en el que intentará encontrar, de nuevo, su lugar en el mundo. Ayudado por la gente en el convento en el que creció, poco a poco va recuperando la salud y empieza el viaje rumbo a su re-encarnación.


Me verás caer


Ya en el hoyo, lleno de heridas y con sus sentidos faltantes fallando, Daredevil comienza a cuestionarse no solo su existencia, sino su misma naturaleza. En un mundo lleno de criminales y donde sus amigos siempre estarán en peligro, Matt Murdock quiere dejar de existir, para dejar al diablo salir y que la justicia se haga en Hell's Kitchen. Ya no es necesario un abogado, Daredevil sera juez, jurado y verdugo.



Matt se fuerza a regresar a las calles, para poder demostrar que sigue siendo el diablo defensor que su ciudad necesita. Es hora de intentar recuperar la confianza y demostrar que está listo para volver a la acción. Pero mientras Murdock se prepara, Wilson Fisk pone en marcha los planes de su regreso y liberación, por lo que es cuestión de tiempo antes de que ambos de vuelvan a encontrar.


El primer acto de la serie se centra en Daredevil intentado regresar, encontrar su motivación y saber si es la vida que desea. Pero lo más importante, es que es un viaje de toda la temporada, se ponen los cimientos en los primeros episodios y de ahí, inteligentemente, comienzan a construir el camino de nuestro héroe, que es largo, difícil y más accidentado de lo que uno quisiera.


El villano indicado para el héroe caído


Desde que comenzó el Universo Cinematográfico Marvel, las sagas se han caracterizado por la falta de buenos villanos. Si bien con personajes como Vulture, Killmonger y Thanos se han ido reivindicando. Es posible que esta temporada tenga el mejor villano de una adaptación live action de Marvel.


Haciendo su regreso después de la primera temporada y con un pequeño teaser en la segunda, Vincent D'Onofrio vuelve a interpretar a Wilson Fisk, en la que es posiblemente la mejor actuación no solo de la temporada, sino de todas las adaptaciones de Marvel en Netflix. El Kingpin se convierte en uno de los mejores villanos de la historia, no solamente por la acertada actuación de D'Onofrio, sino por todo el contexto en el que se desarrolla su personaje.



La simple idea de Wilson Fisk se siente con un balde de agua fría llena de desesperanza, el personaje llega a ser un ser casi omnipotente que se encuentra controlando todo y en cada momento. A medida que avanza la temporada, vemos como ha sido planeado de la manera más minuciosa posible, como cada paso estaba ya en la mente del Kingpin y cuando nuestro héroe parece finalmente tener la ventaja, todo se desvanece.


El poder de Thanos es bastante intimidante, es básicamente imposible destruir a un ser con tanta fuerza, pero ver la planeación de Fisk y la influencia que tiene sobre los demás, es simplemente incomparable. En cada vuela está él, con alguna trampa planeada, con alguien observando tus movimientos, cuando te ataca Thanos mínimo sabes que el golpe viene de frente, el de Fisk no lo podrás ver venir.



Junto a él, se encuentra Benjamin Pointdexter quien lentamente se convertiría en Bullseye, otro de los icónicos villanos de Daredevil. Acertadamente, los escritores le dan un trasfondo al personaje. No siendo un simple asesino, sino un personaje mucho más interesante. Así como todo en la serie, se va desarrollando lentamente y su transformación en Bullseye se concreta paulatinamente.


Me verás volver


Todo el camino recorrido por Daredevil se puede resumir a esa batalla final contra Wilson Fisk y Bullseye. Durante la temporada, Matt se mueve entre la luz y la oscuridad, con cada paso que da, se pregunta si es lo correcto, si es hora de cruzar la línea y acomodarse en la oscuridad, donde los diablos pertenecen. Pero siempre regresa a la luz y todo gracias a sus amigos.


La duda principal de Matt al comenzar la temporada, es saber si el amor que siente por Foggy y por Karen y sus ganas de protegerlos, lo hacen débil y vulnerable. A medida que todo avanza, nuestro héroe se levanta gracias a ellos. Los tres se hacen fuertes y son mejores cuando están juntos, así como Wilson se hace más fuerte con Vanessa.


Por más ridículo y cheesy que suene, el amor es posiblemente el principal tema de la temporada. El amor por Vanessa mueve al Kingpin durante toda la temporada, el de Nadeem por su familia y el de Matt por sus amigos siempre están presentes. Los sacrificios, las decisiones y todo lo que hacemos por amor, como lo muestra la serie, nos pueden ayudar a levantarnos y, en algunas veces, pueden ser usados para hacernos caer.